-Si me encuentro en disposición, ¿entiendes?, si me encuentro en disposición. Trabajar para ti, cuanto quieras. Soy tu hombre. Pero en lo que se refiere al santuri, es cosa diferente. Es un bicho salvaje, requiere libertad. Si me hallo dispuesto, toco. Y hasta canto, también. Y bailo. Bailaré el zeimbekiko, el hasapiko, el pentozali, siempre que, te lo digo de veras, me encuentre dispuesto para ello.
Zorba, Nikos Kazantzakis